En la prensa nacional de hoy aparece el anuncio de que el gobierno está sopesando la posibilidad de que en los Presupuestos General del 2021 que ha de presentar, se congelen nuevamente las retribuciones de los empleados públicos.
Se trataría de una nueva afrenta, un nuevo recorte a acumular sobre todos los que hemos venido sufriendo durante décadas y que ha supuesto una grave pérdida de poder adquisitivo acumulada.
Los sindicatos presentes en la Mesa General de Función Pública, responsable de negociar la subida salarial, y muy especialmente CCOO y UGT, no se pronuncian. Ni están ni se les espera. ¿Por qué no han exigido ya de forma urgente la reunión de la Mesa para iniciar las negociaciones? ¿Por qué faltando sólo dos semanas para que se cumpla el plazo en el que el gobierno presente el proyecto de presupuestos, todavía no se han reunido? Un silencio más que sospechoso por parte de aquellos que dicen representar a “todos” los empleados públicos.
Desde USO le queremos decir al Gobierno de coalición que preside Pedro Sánchez ¡¡BASTA YA!!
Ni este ni ningún gobierno anterior, aprecia la labor de los empleados públicos. Sabemos que en cuanto tienen la oportunidad descargan en empresas privadas, gestiones y funciones que deben estar reservadas a los empleados públicos. Y que no quieren ni oír hablar de aumentar la oferta de empleo público, dejando sin resolver el déficit y el envejecimiento de las plantillas.
No existe ninguna voluntad política de recuperar la maltrecha estructura salarial de los empleados públicos, que en el 2010 vieron recortadas sus nóminas entre el 5 y el 7%, y que sólo en la última década ha supuesto una pérdida de poder adquisitivo cercana al 16%.
Por ello, junto a la inoperancia de sindicatos como CCOO y UGT, resultan del todo irritantes las declaraciones de la ministra Calviño de que los empleados públicos hemos ganado poder adquisitivo en los últimos años.
Sólo se nos ocurre que se puede estar refiriendo a los puestos de asesor que tenga ella misma en su departamento ministerial, porque lo cierto es que el resto de los empleados públicos no hemos hecho otra cosa más que perder dinero.
Es fácil entender que este gobierno intentará de nuevo ponernos en contra a la opinión pública para justificar los recortes que tenga preparados. Por lo que desde la USO queremos recordarle que son esos mismos empleados públicos a los que ahora quiere castigar en sus retribuciones, los que han hecho posible tramitar los ERTES, el ingreso mínimo vital, y todos los servicios que la ciudadanía ha necesitado de forma urgente. Y nos referimos a esos colectivos que todos hemos aplaudido desde nuestros balcones durante el estado de alarma (personal sanitario, bomberos, policía, personal de limpieza, personal sociosanitario, etc), que son empleados públicos y que como reconocimiento a su excelente labor se verán afectados asimismo de cualquier medida salarial que se adopte en los Presupuestos Generales del Estado contra los empleados públicos. ¡Así agradece el Gobierno, el esfuerzo personal, dedicación y trabajo durante esta pandemia!
Desde USO consideramos que ese no es el camino a seguir por una Administración que tanto tiene que agradecer a sus empleados. Una Administración que debe corregir los graves déficits de personal y problemas en la gestión, que con frecuencia la vuelven ineficaz, restando operatividad y calidad en la prestación de los servicios que la ciudadanía demanda y necesita.