La sección sindical de USO en el Puerto de Santander considera insostenible la situación de la policía portuaria, que achaca al déficit de gestión de la seguridad del Puerto de Santander en los últimos años.
En un comunicado de prensa, USO señala que esta situación ha colocado a las instalaciones portuarias santanderinas en el centro de atención de las mafias de tráfico ilegal de personas, especialmente, albanesas.
Por ello, ha señalado que las medidas anunciadas por la Policía Nacional y la Autoridad Portuaria no van a solucionar el problema y solo son un parche a la situación.
Nuestra Sección Sindical afirma que en los últimos cuatro años los policías portuarios son un 30 por ciento menos, fruto de jubilaciones no cubiertas, que dificulta la realización de su labor específica, y ha señalado que la situación de los profesionales es de estrés laboral y de una importante indeterminación.
Los agentes portuarios son una policía administrativa y como consecuencia del efecto llamada, fruto de las deficiencias en materia de seguridad, a su labor específica se ven obligados a ejercer funciones de policía de frontera. Esta situación se agudiza los fines de semana, viernes y sábado noche, cuando se incrementan los saltos a la valla perimetral del Puerto por parte de la migrantes y ni la Policía Nacional ni Guardia Civil se encuentra dentro de las instalaciones.
El sindicato afirma que en esos momentos, se exige a esa policía portuaria una actuación que excede sus competencias y compromete su seguridad.
USO reconoce la labor que realizan tanto la Policía Nacional, y su Brigada de Respuesta a la Inmigración Clandestina (BRIC), como la Guardia Civil en las labores de control y vigilancia, pero el Puerto de Santander es un auténtico coladero que exige una decidida intervención en inversiones tanto en nuevas instalaciones como en incremento de personal estable de vigilancia y de Policía Portuaria.