FAC-USO Informa: Inexactitudes sobre la protección real de las mascarillas

Desde  FAC-USO hemos sido testigos de cómo durante los últimos días diversos medios de comunicación y otros organismos nos han venido informando acerca de la protección de las mascarillas quirúrgicas e higiénicas. En las informaciones transmitidas nos dicen que dichas mascarillas son totalmente eficaces frente el coronavirus e incluso que su factor de protección está cercano al 100%, pues bien vamos a tratar de explicar por qué esto no es así.

Esta protección que nos anuncian, a saber con qué interés/es, desde luego el de proteger a las personas no, es como mínimo incorrecta puesto que los índices de filtración a los que se refiere son con respecto a «bacterias» (se les olvidó añadir este pequeño detalle). Es decir, son índices de «Eficacia de filtración bacteriana» (EFB). No sabemos si estos medios de comunicación se han enterado de que el Covid-19 lo produce un virus. Y que los virus son hasta 100 veces más pequeños que las bacterias o como lo explican a los niños en primaria, si el tamaño de un hongo equivaliera a un campo de futbol, una bacteria tendría el tamaño de un autobús y un virus, el de un balón de reglamento. Así que imaginad la cantidad de goles que le pueden marcar a unas mascarillas preparadas para parar autobuses.

La eficiencia de filtración depende del tamaño de la partícula que se pretende evitar. Una eficiencia del 70% a 3 µm1 corresponde a un 10% para 0.3 µm y a un 20% para el aerosol respirable (entre 0 y 4 µm). Por lo que los porcentajes de filtración que indican estos medios para esas mascarillas no tienen absolutamente ninguna correlación con los indicados en las FFP2. Ni las mascarillas quirúrgicas y mucho menos las higiénicas ofrecen protección alguna contra virus y aerosoles. Además, Las pruebas de “eficiencia de filtración bacteriana” que se realizan a las mascarillas quirúrgicas para determinar su capacidad de filtración: “determinan la cantidad de agentes infecciosos retenidos por la mascarilla que, está en directa relación con la cantidad de bacterias QUE PASAN A TRAVÉS DE LA MASCARILLA A LA SALA QUIRÚRGICA”. Es decir, los tipos I y II de 95 y 98% de

filtración respectivamente se refiere a la capacidad de “retener” bacterias. O sea, que lo que filtran es el “aire que sale” de las vías respiratorias del que las usa. Y esto con la finalidad de prevenir la contaminación del paciente.

Cuando se dice que las mascarillas quirúrgicas (de las higiénicas ni hablamos) tienen una capacidad de filtración del 95 o 98 % lo que se está diciendo es:

  1. Que se trata de bacterias o gotículas
  2. Que lo que se filtra es el aire exhalado y no el

Desde la FACUSO esperamos que esta información sirva para una correcta valoración de la protección que ofrecen y que las personas no hagan uso, haciendo caso a estas informaciones cuanto menos inexactas, de mascarillas higiénicas y quirúrgicas pensando que tienen una capacidad de filtración del 95%, como dicen estos medios “informativos”, cuando en realidad ese porcentaje solo es aplicable a las bacterias y no contra el coronavirus.

1 µm: Es el símbolo del micrómetro, micrón o micra que equivale a la milésima parte de un milímetro.

Preparación Oposición TL A.G.E

Cursos gratuitos homologados para nuestros afiliados y delegados.

Reclamaciones por Contrataciones en Fraude de Ley

Defendemos tus derechos frente a contratos irregulares, velando por la legalidad laboral.

Ponte al día
¿Quieres recibir nuestras noticias en tu correo?
Renovación de Identidad

Refrescando nuestra imagen, fortaleciendo valores y optimizando la comunicación para crecer juntos.

Calendarios laborales

Herramienta esencial para organizar y gestionar eficientemente el tiempo, vacaciones y días festivos en el entorno laboral.

Enlaces de interés

Otros Asuntos
La reunión concluyó con la ratificación de un informe favorable relativo a la propuesta de complementos E4 presentada por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

Desde FAC-USO vemos estupefactos como los asuntos se dilatan sine die (todavía colea el encuadramiento 5 años después de la firma del IV Convenio), como sistemáticamente se incumplen los acuerdos y, los que tienen potestad para ello, no hacen absolutamente nada, mas allá de “preocuparse”.

Todo un despropósito de aquellos cuya subsistencia depende de que no “molesten” demasiado a la Administración.

Por ello cada día se hace más necesario que sindicatos independientes como USO puedan entrar a negociar, y con tu ayuda lo conseguiremos.