El pasado 28 de junio se publicaba la Encuesta Anual de Estructura Salarial correspondiente al año 2015. La ganancia media anual de las mujeres fue de 20.051,58 euros, mientras que la de los hombres, fue 25.992,76 euros. El salario medio anual femenino representó el 77,1% del masculino en 2015. Por tanto las mujeres cobraron 5.941,18 euros menos de media.
La ganancia media anual fue de 23.106,30 euros, un 1,1% más que el año 2014. Los hombres superan esa media en 2.886,46 euros y las mujeres no la alcanzan por 3.054,72 euros.
El salario mediano que resulta de dividir el nº de trabajadores/as en dos partes iguales, los que tienen un salario superior y los que tienen un salario inferior fue de 19.466,49 euros en 2015.
El sueldo más frecuente llega a los 16.500 euros (1.375 euros mes/12 pagas).
El 18,2% de las mujeres tuvo ingresos por debajo o iguales al SMI (648,60 euros en 2015), más del doble de porcentaje de los hombres, que representan el 7,4%. Sin embargo, en los salarios más elevados, son los hombres los que alcanzan casi el doble de porcentaje que las mujeres, al representar ellos el 9,8%, frente al 5% de mujeres.
Si nos fijamos en las personas que su ganancia hora está por debajo de los 2/3 de la ganancia media, lo que se llama ganancia baja, éstas representan el 16,7% del total de asalariados/as, siendo el 65,5% mujeres y el 34,5% hombres.
Salarios por tipo de jornada
La ganancia media anual en los contratos a tiempo completo aumentó en 0,3%, y la de tiempo parcial en un 2,8%. Se aprecian también diferencias entre hombres y mujeres: mientras en las mujeres la ganancia en el tiempo completo no ha experimentado variación alguna la de los hombres ha subido en un 0,7%. Pero la mayor diferencia se encuentra en las jornadas a tiempo parcial, donde la media ha subido en los hombres un 5,1% frente al escaso 1,7% de subida en las mujeres.
La ganancia media por hora sin diferenciar entre hombres y mujeres alcanza los 15,01 euros: la hora a tiempo completo está por encima en 73 céntimos y por debajo en el tiempo parcial dónde la media es de 10,62 euros.
Si diferenciamos entre hombres y mujeres, la ganancia media de los hombres por hora en el tiempo completo está 1,59 euros por encima de la ganancia media de las mujeres. En las jornadas a tiempo parcial, la diferencia se sitúa en 1,5 euros a favor de los hombres.
Comparar salarios en la misma jornada recorta la diferencia entre hombres y mujeres alcanzando el 86,1%, pero sigue existiendo sin tener una explicación objetiva.
Si observamos las variaciones respecto a 2014, el tiempo parcial de las mujeres ha experimentado un aumento del 0,2% frente al 4,3% de aumento en la ganancia media de los hombres en el tiempo parcial.
En el tiempo completo la ganancia media de las mujeres es superior a la de los hombres en 0,7 puntos, situándose en el 1,8% frente al 1,1 de aumento en la ganancia media de los hombres a tiempo completo.
Salarios por tipo de contrato
Ambos sexos obtienen menores salarios en los contratos temporales que en los indefinidos, pero mientras que los hombres tienen un salario superior a la media en los contratos indefinidos e inferior a la media en los contratos de duración determinada, las mujeres tienen un salario medio inferior en cualquiera de las dos situaciones, tanto si tienen contrato indefinido como de duración determinada.
Los porcentajes en hombres son parecidos, con un 20,4% superior a la media en los indefinidos y un 25,2% inferior a la media en los de duración determinada. Las mujeres tienen porcentajes más dispares: están por debajo de la media en un 8,8% en los indefinidos y un 32,6% por debajo de la media en los temporales.
La ganancia por hora en las mujeres que trabajan con contratos temporales fue un 20,6% más baja que la media. En los contratos indefinidos la ganancia por hora en los hombres fue un 11,7% superior a la media, mientras que en las mujeres fue un 5,6% inferior a la media.
Salarios y edad
A mayor edad, mayor diferencia entre los salarios de los hombres y de las mujeres. Si la media de la ganancia de las mujeres se situó en el 77,1% respecto de los hombres, se observa que hasta los 44 años esa brecha se acorta, menos entre los 20 y 24 años que se sitúa en el 76,3%.
El salario medio anual femenino representó el 77,1% del masculino, ese porcentaje aumentó y por tanto la diferencia entre el salario de mujeres y hombres se redujo en los tramos de edad de 25 a 44. Sin embargo disminuye el porcentaje en las mujeres más jóvenes -de 20 a 24 años- por lo que ganan menos que los hombres en esa edad, y sigue disminuyendo en los tramos de 45 a 64 años, con el porcentaje más pequeño en el tramo de 55 a 59 años dónde el salario medio de las mujeres representa el 72,2% del de los hombres.
Las mujeres siguen teniendo contratos de menos horas, las jornadas reducidas tiene rostro de mujer y sigue existiendo en muchos convenios una valoración diferente del trabajo si la categoría está feminizada o masculinizada, con complementos que muchas veces no justifican ni el tipo de trabajo ni las capacidades y actitudes que se deben tener para desempeñarlo. Da igual en qué comunidad autónoma vivamos o en qué actividad económica trabajemos, las mujeres siguen cobrando menos que los hombres.
