Entre los días 22 al 25 de enero se ha celebrado en la ciudad italiana de Bari, capital de la región de Puglia, el XVIII Congreso Nacional de la CGIL (Confederazione Generale Italiana del Lavoro), al que USO ha sido invitada. En la jornada previa, el día 21, ha tenido lugar un seminario internacional relativo a la crisis de la democracia, la irrupción del populismo, la revolución digital y las tendencias de la globalización.
Un total de 867 delegados con derecho a voto y más de mil invitados han atendido este congreso de la principal central sindical de Italia, en el que la delegación internacional la han formado 85 dirigentes sindicales de distintos países del mundo, entre ellos, Javier de Vicente, secretario de Acción Internacional y Desarrollo
Sostenible de USO.
La CGIL, que se estructura en 12 federaciones profesionales, 21 uniones regionales y 115 Cámaras del Trabajo, declara una afiliación superior a los cinco millones de personas, incluyendo a pensionistas, trabajadores en activo y desempleados. En los últimos 8 años la central ha estado dirigida por Susanna Camusso, como secretaria general, quien cede su testigo debido a la limitación de dos mandatos prevista en los Estatutos.
En el congreso han intervenido los presidentes de la CES y de la CSI, el belga Rudy de Leeuw y el nigeriano Ayuba Wabba, respectivamente.
En la agenda política de los debates y de la resolución general del congreso han ocupado un papel destacado la cuestión de la migración -con el terrible drama del mar Mediterráneo convertido en gigantesco cementerio-, la crisis de derechos humanos en múltiples países y la penetración en Europa de partidos fascistas y xenófobos.
A nivel nacional, la CGIL ha confirmado su disposición a confrontar las políticas populistas, nacionalistas y neoliberales del gobierno de coalición entre el Movimiento 5 Estrellas y la Liga Norte, con Di Maio y Salvini como Vicepresidentes del independiente primer ministro Conte a la cabeza. De partida el sindicato ha convocado una gran manifestación el Roma, para el próximo 9 de febrero, de común acuerdo con la otras dos grandes confederaciones del país, la CISL y la UIL.
El Congreso ha elegido a los 179 miembros del Comité Directivo Nacional y a los 302 componentes de la Asamblea General Nacional, máximo órgano entre congresos. A su vez, este último órgano se ha reunido en la tarde del día 24 para elegir al secretariado y al nuevo secretario general.
Para este último puesto se enfrentaban dos candidaturas: la de Maurizio Landini y la de Vincenzo Colla, ambos procedentes de la importante federación sidero-metalúrgica (FIOM) y de la unión territorial de Emilia Romagna. Finalmente, con la mediación de Susanna Camusso, ambos dirigentes han adoptado una decisión de común acuerdo para crear un equipo unitario en el cual Landini accede a la secretaria general, mientras que Colla queda como vice-secretario general. A su vez, el secretariado estará compuesto de forma equilibrada entre las dos tendencias.