No tienen nada que ver ni en «importancia» ni en repercusión social pero celebrar el mismo día el #8M día de la mujer y fiesta de los bomberos (y sólo de los bomberos) nos da una idea de la intima relación y del largo camino que queda por recorrer en materia de igualdad real en este Ayuntamiento de Soria, tan amigo del postureo y de ponerse al frente de marchas, movimientos y manifestaciones que contradicen sistemáticamente, en su propia acción de gobierno y en la gestión del personal en el Ayuntamiento de Soria.
Luchar por la #Igualdad desde las instituciones tiene que ir más allá del reparto de subvenciones que confían en su retorno, mediante el correspondiente incremento de su monetizada infiltración social para el control político de nuestra pequeña ciudad de Soria, algo que ejerce con habilidad el actual equipo de gobierno.
Luchar por la #Igualdad en el Ayuntamiento de Soria debía haber pasado (y no lo ha hecho) por cumplir de manera efectiva a lo largo de los últimos cuatro años, con el desarrollo de un plan contemplado en el Acuerdo/Convenio que no se ha concretado, con el silencio cómplice y la inacción de los sindicatos firmantes y amigos, en un día como hoy, de las banderitas de colorines.
Lucha por la #Igualdad debía haber pasado por denunciar la hipocresía del Ayuntamiento de Soria, que lleva años cuidándose, muy mucho, de sacar ofertas de empleo que en elevadísimo porcentaje podrían ser ocupados por mujeres, con las lógicas derivadas para Soria respecto a la intima relación que ofrece la estabilidad personal y en el empleo y la garantía de un mínimo futuro para Soria.
Luchar por la #Igualdad y respetar en el Ayuntamiento a las mujeres trabajadoras pasa por cumplir la obligación de respetar sus derechos como empleadas públicas y funcionarias de carrera, con derecho a una promoción profesional, que el PSOE lleva años negándoles, con su obsesivo manejo (y tejemaneje) en materia de personal.
Luchar por la #Igualdad supone respetar la capacidad y el mérito de decenas de trabajadoras municipales, auxiliares, administrativas, policías, que podrían promocionar (y no les dejan) para ocupar puestos superiores que, en muchos casos, fueron ocupados por hombres, algo que le interesa poco al «progresista» gobierno municipal de Soria, más amigo de los floreros políticos que del ejercicio de la promoción de la igualdad real.
Luchar por la #Igualdad debería pasar por acabar con la relación de intima dependencia de empleadas (y empleados) sujetas a contratos, que necesitan un plus de «portarse bien» para seguir trabajando en el Ayuntamiento. Algo atentatorio contra la dignidad general de los empleados públicos, pero que les conviene también a determinados sindicatos, cómplices de la laminación de la figura del funcionari@ de carrera en el Ayuntamiento de Soria.
Luchar por la #Igualdad pasa por respetar la legalidad que el en Ayuntamiento de Soria se vulnera y convocar, abiertos a todas y todos, los puestos de trabajo vacantes, cubiertos en muchos casos en una agónica eventualidad, dando oportunidad de acceso a un perfil de empleo dónde en un elevadisimo porcentaje, las mujeres demuestran ser más capaces que los hombres.
Luchar por la #Igualdad supone estar obligados a avanzar en que la mujer incremente sus cotas de poder en la escala de nuestra administración local, desde el respeto a los principios del mérito, donde muchas veces desbordan a los hombres desde el ejercicio del propio principio de #Igualdad. Supone también posibilitar su presencia física y real en los sectores donde la mujer está infra-representada o directamente, desaparecida.
Ejercer la promoción de la igualdad pasa por facilitar que hoy 8 de marzo, en Soria pudiéramos celebrar el día de los bomberos y las BOMBERAS, unas compañeras que NECESITAMOS.
Queda mucho por hacer. Desde USO Soria, feliz #8M, a todas y todos.
