El sindicalista italiano Luca Visentini ha sido reelegido como secretario general de la Confederación Europea de Sindicatos (CES, ETUC por sus siglas en inglés) en el 14º Congreso de la organización, celebrado en Viena, y al que USO acudió con una delegación encabezada por nuestro secretario general, Joaquín Pérez. Además, el francés Laurent Berger ha sido elegido presidente de la CES. Luca Visentini fue elegido secretario general por primera vez en el Congreso de París, en 2015, tras una dilatada carrera en el sindicato italiano UIL y después de haber sido elegido secretario confederal de la CES en 2011.
La nueva Ejecutiva de la CES la completan dos secretarios generales adjuntos, la irlandesa Ester Lynch y el sueco Per Hilmersson; y tres secretarios confederales, la estonia Liina Carr, la alemana Isabelle Schömman y el belga Ludovic Voet, procedente de la confederación ACV-CSC.
En el Congreso, se ha renovado el Plan de Acción para los próximos cuatro años, con políticas adaptadas a un mundo laboral en constante cambio. Con el documento, dividido en seis capítulos, el conjunto de sindicatos europeos pretendemos inducir un cambio en las políticas europeas, haciendo llegar nuestras propuestas a los nuevos Parlamento y Comisión Europeos, tanto en sus capacidades legislativas como de ejecución. Entre ellas, por ejemplo, reformar las políticas económica, presupuestaria y fiscal de la Unión Europea, que se basen en la justicia social y en el crecimiento sostenible, con unas transiciones justas tanto en materia digital como ecológica.
Además, la CES defenderá en todo momento que se reafirme el Pilar Europeo de Derechos Sociales, básico para la protección de toda la ciudadanía y, especialmente, la más vulnerable. El Congreso ha aprobado también el Manifiesto de Viena, que resume las principales reivindicaciones del sindicato europeo.
Joaquín Pérez, secretario general de USO, destaca “la importancia de este Congreso, donde se decide un marco de acción común que nos hace más fuertes en nuestras reivindicaciones en Bruselas, donde, aunque aún nos cueste creerlo a pie de calle, de deciden las principales políticas socioeconómicas y laborales que luego deben ser adoptadas en todos los países de la Unión. Solo reforzándonos como conjunto de sindicatos con unas reivindicaciones comunes podremos ejercer la fuerza necesaria para todos los trabajadores”.