La CSI ha reclamado a las autoridades de Hong Kong que se retiren todos los cargos que pesan contra Lee Cheuk Yan, secretario general de la Hong Kong Confederation of Trade Unions y contra otros manifestantes pro-democracia que se enfrentan a procesos penales.
Lee fue detenido, junto con los defensores de la democracia Yeung Sum y Jimmy Lai, siendo acusados de reunión ilícita por su participación en una concentración pública el 31 de agosto del año pasado. En total, cerca de 7.000 personas han sido detenidas y el 80% de los casos siguen “bajo investigación”. La vista judicial de Lee está prevista para el 5 de mayo.
“Los cargos que se imputan a Lee y a otros defensores de la democracia buscan suprimir cualquier forma de disidencia, conforme China intenta reforzar su posición en Hong Kong a través de la administración de la jefa ejecutiva, Carrie Lam. Estas personas se enfrentan a cargos penales cuando simplemente han dicho la verdad y reclamado sus derechos fundamentales. El Gobierno de Hong Kong debería gobernar en interés de la población, en lugar de doblegarse a China”, indicó la secretaria general de la CSI, Sharan Burrow.
Además de retirar los cargos, la CSI insta a Lam a levantar las restricciones a la organización de asambleas pacíficas y poner término a la injerencia policial en reuniones públicas, dejar de detener a los participantes en asambleas pacíficas, poner fin a la represión contra los sindicatos y readmitir a los trabajadores despedidos, además de establecer una comisión de encuesta independiente para investigar las posibles violaciones de los derechos humanos, incluyendo la violencia policial y las detenciones arbitrarias.