El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital acaba de publicar, a través del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad, el Informe «Usos y actitudes de consumo de contenidos digitales en España 2021».
Durante los años transcurridos desde la anterior oleada de este estudio (2016), el consumo de contenidos digitales ha crecido sustancialmente.
Centrando la mirada en la población de 16 a 75 años, mismo intervalo de edad que se encuestó en el anterior estudio, se puede comprobar como el consumo de todos los tipos de contenidos ha aumentado.
En algún caso, el incremento en la tasa de consumo es especialmente llamativa, como por ejemplo en lo que se refiere a películas, series, etc., que han pasado de consumir un 59,5% a un 80,3% en la actualidad.
Es especialmente destacable el notable incremento de personas que accede contenidos formativos, que se instaura como uno de los tipos de contenidos más utilizados por las personas entre 16 y 74 años.
El aumento de la tasa de consumido viene acompañado de un aumento de la frecuencia de consumo de los distintos ontenidos. De esta manera, un 48,3% de quienes leen periódicos y revistas digitales lo hace con periodicidad diaria.
De igual manera, un 44, 9% de quienes escuchan música por medios digitales también lo hace diariamente.
El uso y consumo de contenidos digitales, por tanto, se ha normalizado y generalizado entre la población española, de tal manera que, la casi totalidad de la población consume al menos un tipo de contenido digital.
Esta generalización del uso de contenidos digitales no puede ocultar la existencia de perfiles alejados de la utilización de servicios digitales. Si bien, sólo un 6,7% de la población mayor de 14 años no ha utilizado contenidos digitales, este reducido grupo se concentra en un perfil muy determinado.
Por ejemplo, el 36% de las personas mayores de 75 años no ha consumido contenidos digitales, o un 34,9% de personas con estudios primarios ha hecho lo propio.
Mientras que, entre los jóvenes lo más habitual es mantener un perfil de consumo alto, tanto en frecuencia de consumo como en tipos distintos de contenidos consumidos, a medida que aumenta la edad desciende el hábito de consumo, hasta llegar al grupo de personas mayores de 75 años, donde un 36% no consume contenidos digitales y un 20% lo hace de manera excepcional.
Todo ello dibuja un segmento de personas alejadas de lo digital y de su consumo de contenidos caracterizado por:
• En mayor medida, mujeres.
• De más de 75 años.
• Habitantes de entornos rurales y de menor tamaño.
• Con niveles de ingresos menores.
• Nivel de estudios primarios.
Aunque el aumento de consumo de contenidos digitales no es achacable por completo a la pandemia y el periodo de confinamiento, es indudable la influencia que ha tenido en la percepción y uso de contenidos digitales.
La mayoría de la población aumentó su frecuencia de consumo de contenidos digitales. En algún caso, como en películas y series de manera muy destacada (el 65,8% aumentó su visionado durante el confinamiento) y sólo en un porcentaje mucho más reducido encontramos a población que dice haber disminuido el uso de contenidos digitales durante la pandemia de la COVID–19.
Tras el confinamiento, buena parte de la población volvió a sus pautas de consumo habituales antes de la pandemia, aun así, un porcentaje significativo de personas ha mantenido un consumo de contenidos digitales superior al que tenía previamente a la crisis sanitaria.
Sin embargo, este incremento ha sido desigual, ya que ha sido mayor entre las personas que ya tenían un consumo elevado.
Por ejemplo, las personas con edades entre los 14 y 24 años un 60% dice que aumento su utilización de servicios digitales durante el confinamiento y continúa consumiendo más ahora que antes del mismo mientras que, por el contrario, sólo un 19,3% de mayores de 75 años han hecho lo propio.
En este último segmento por edades lo más habitual es que la personas no haya modificado sus pautas de utilización de contenidos digitales (27,6%).
El incremento del consumo es especialmente notable en lo que se refiere al consumo de películas y series, donde un 29% de quienes consumen dice mantener ahora un uso superior al que tenía antes de la pandemia. De igual manera, un 28,5% de los que acceden a contenidos educativos y formativos, lo hace ahora en mayor medida que antes del confinamiento.