Con motivo del Consejo de Ministros de Sanidad del martes 7 de diciembre de 2021, la FSESP exige a los ministros que defiendan el derecho a la salud y la asistencia, recordando que la resistencia de los sistemas de salud y asistencia implica inversión y financiación. Los ministros deben defender a los trabajadores de nuestros hospitales, residencias de ancianos y el sistema sanitario y asistencial en general, desde las limpiadoras hasta los trabajadores administrativos, las enfermeras, los médicos y el personal de apoyo.
Los ministros dicen que necesitamos volver a las normas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento. Esto significa una vuelta a la austeridad coordinada y a la miseria que provoca.
Jan Willem Goudriaan, secretario general de la FSESP, afirma: «Las mujeres y los hombres que mantuvieron nuestro sistema sanitario y asistencial y nuestros servicios públicos en funcionamiento durante esta pandemia merecen algo mejor que una vuelta a la austeridad. El derecho a la asistencia y el derecho a la salud para todos -principios del Pilar de Derechos Sociales de la UE- requieren financiación para hacer frente a la persistente escasez de personal y a la elevada carga de trabajo. La redistribución de la riqueza debe ser una de las principales prioridades de los Estados miembros para hacer frente a las crecientes desigualdades y financiar nuestros servicios públicos, la protección social y las medidas contra el cambio climático.»
Los sindicatos del sector sanitario expusieron recientemente las lecciones aprendidas de la pandemia y lo que se necesita de los gobiernos y los empresarios para mejorar la situación. Un punto clave es que las políticas neoliberales de creación de mercados en la sanidad, la privatización de los servicios y la austeridad para frenar la financiación simplemente no funcionan.
El Dr. Adam Rogalewski, responsable de políticas de salud y servicios sociales de la FSESP, añade: «Las políticas neoliberales debilitaron nuestros sistemas de asistencia sanitaria y social y provocaron que no estuvieran preparados para la pandemia de COVID-19. La pandemia puso de manifiesto que necesitamos urgentemente servicios orientados a las necesidades y trabajadores adecuadamente remunerados y protegidos de los riesgos de SST, incluidos los riesgos psicosociales y el estrés. Muchos trabajadores están agotados y lidian con el estrés y el agotamiento. Esta es la única manera de garantizar una mayor calidad de la atención y, para ello, debemos asegurarnos de que la UE aplique estos principios».