Hace ya varios meses que se celebraron elecciones generales y seguimos sin Gobierno, eso dicho así podría ser algo malo. Pero la realidad, es que en el día a día los ciudadanos no hemos notado nada, ni peor, ni mejor. Claro que peor no nos puede ir, seguimos con salarios bajos, muy bajos. Con datos de Convenios firmados en los últimos tiempos, en los que siguen imperando tablas salariales a la baja, con subidas medias del 0,63% y con pocas expectativas de mejora.
A todo esto se suma, la inestabilidad económica derivada de la política. Ya se sabe que el dinero es cobarde, y eso repercute en cualquier recuperación económica. En este panorama los empleados públicos seguimos sin tener claro, cual es el futuro de los Servicios Públicos en España. Todos hablan de ellos, pero por un motivo u otro nadie define nada, a los sumo, dicen que se “recuperaran”…..y la pregunta es: ¿que se recuperara? ¿ Las deudas, los bajos salarios, los viejos esquemas, las ofertas publicas de empleo congeladas, la falta de criterio general sobre los servicios públicos, …el que?
En España hace falta ya, una definición clara de que es un Servicio Público, y que esa definición tenga carácter general. No puede ser que una Administración diga una cosa y otra la contraria. Por ejemplo, hay Ayuntamientos que tienen la limpieza viaria o los jardines como Servicio Público y son ellos los responsable directos de su gestión, y otros al contrario, los sacan a concurso y se los entregan a empresas privadas. Esa es la definición que pedimos los empleados públicos, no podemos estar al pairo de las decisiones políticas locales o partidistas.
Ese catalogo de Servicios Públicos, los deberían definir por consenso; y su aplicación sería inmediata y obligatoria en todas las Administraciones Públicas. En los tiempos que vivimos, y tomando la globalización en positivo, esto es inaceptable. Claro que un país que aspira a ser cada vez mas pequeño y diferenciado, es lo que por desgracia los ciudadanos normales y corrientes, parece que tenemos que aguantar. Estas situaciones NO son lógicas, ni normales, los ciudadanos nos merecemos mas respeto y dedicación, sin barreras Autonómicas y de partido, y debemos exigir que alguna vez, solo alguna vez, nuestros politcios y partidos, piensen en el conjunto de los ciudadanos, no solo en los que los que les votan, o viven en su ciudad o Comunidad. Lo contrario es lo mezquino, lo cutre y la miopía mas absoluta de una sociedad del bienestar.
Un ejemplo claro, y peligroso, de esa descoordinación y falta de definición ocurre en la Sanidad. Este es un Servicio Público, recogido en la Constitución, pero que su gestión partida y compartida por múltiples Administraciones, provoca graves disfunciones.
Resulta sorprendente el tema de las vacunaciones de nuestros hijos, y francamente, no se entiende que las decisiones políticas afecten en negativo a los ciudadanos, simplemente por el hecho de ser de una Comunidad diferente a otra.
En los cuadros que incluimos al final, se puede ver el calendario recomendado por la Asociación Española de Pediatría, y en el siguiente, algunas de esas vacunaciones recomendadas, cambiadas por criterios diversos en algunos calendarios de CCAA.
¿Por que se producen estas disfunciones? La respuesta es triste, decisión política basada en criterios poco claros y nada homogéneos con lo que es la opinión de la inmensa mayoría de los profesionales médicos e investigadores implicados en esta materia.
Pasa igual con la inversión de las diferentes CCAA en Sanidad, los problemas que existen en los traslados de enfermos entre Comunidades, o en las listas de espera de algunas especialidades. El Sistema Nacional de Salud no funciona como debiera, por las ansias políticas de diferenciar, no hay otra explicación. Lo triste es que en aras de el buen rollo de algunos partidos y políticos, estas cosas se perpetúan con el tiempo. Y esto es también, precariedad en los Servicios Públicos, les guste o no a los políticos.
CALENDARIOS Y FECHAS FUERA DEL CALENDARIO GENERAL RECOMENDADO QUE APLICAN ALGUNAS CCAA.
SE CORRESPONDE ESTA INFORMACIÓN, CON EL CALENDARIO DE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE PEDIATRIA PARA 2016