La grave escasez de personal está afectando a la prestación de servicios sanitarios y sociales en toda Europa y las afiliadas a la FSESP han tomado medidas en respuesta.
Se trata de un problema a largo plazo, pero ha pasado a primer plano desde la pandemia de COVID y, en los últimos seis meses, muchos sindicatos de la FSESP del sector han estado negociando, haciendo campaña y movilizándose para garantizar un aumento de la financiación, más puestos de trabajo y mejores salarios y condiciones.
Después de los innumerables sacrificios que los trabajadores de la sanidad y la asistencia social hicieron durante la pandemia, no es de extrañar que las afiliadas a la FSESP de estos sectores se hayan movilizado para obligar a los gobiernos y a los empleadores a abordar la escasez de personal, los bajos salarios y las malas condiciones de trabajo que socavan la prestación de los servicios públicos. Estas acciones se han vuelto aún más urgentes tras el aumento de la inflación en toda Europa.
En los últimos seis meses, las afiliadas a la FSESP de 15 países han participado en al menos 10 grandes manifestaciones, 12 casos de huelga y han negociado 16 convenios. Los acuerdos sectoriales abarcan a cientos de miles de trabajadores, entre ellos en Italia (sanidad pública y también sin ánimo de lucro), los Países Bajos (trabajadores de la salud mental, hospitalarios y de medicina general, y trabajadores de enfermería y asistencia), Alemania (trabajadores de la educación infantil y de los servicios sociales), Austria (trabajadores de la asistencia infantil y de la sanidad privada y social), Bulgaria (médicos y enfermeras), Noruega (sector sanitario) y Finlandia (trabajadores de la sanidad privada y la asistencia social). Mientras tanto, a nivel europeo, la FSESP y la organización de empleadores del sector hospitalario y sanitario HOSPEEM firmaron un nuevo acuerdo marco sobre la contratación y la retención en los hospitales, centrado en el fortalecimiento del atractivo del sector.
Las afiliadas a la FSESP también han buscado formas innovadoras de hacer frente a la falta de personal. En Alemania, ver.di negoció un convenio colectivo específicamente para abordar esta cuestión y la excesiva carga de trabajo que sufren muchos trabajadores sanitarios. Tras una prolongada huelga, el sindicato negoció un acuerdo con seis hospitales universitarios de la región de Renania del Norte-Westfalia que prevé tiempo libre compensatorio por los periodos trabajados en salas y departamentos con escasez de personal, así como compromisos para aumentar la plantilla.
Desde principios de año se han llevado a cabo otras huelgas y protestas por parte de los sindicatos de la sanidad y la asistencia, junto con otros sindicatos de los servicios públicos, en Austria, Bélgica, Finlandia, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Portugal, España y Turquía, donde los sindicatos de la sanidad consideraron que la falta de fondos y de personal fue un factor que contribuyó al trágico asesinato de un médico en un hospital.