Delegados y delegadas de FAC-USO acompañaron ayer en A Coruña a los trabajadores de la Seguridad Social, que iniciaron movilizaciones en rechazo de la decisión de este organismo de cerrar dos de las oficinas de atención al público, que según han impuesto, pasarán a estar integradas en el edificio de la Dirección Provincial, lo que rompe por completo con el principio de proximidad e inmediatez al ciudadano que tanto pregonan.
Desde la Junta de Personal se rechaza esta medida que supone un paso más en la política de desmantelamiento de los servicios públicos.
La protesta, convocada por la Junta de personal de la Administración General del Estado y el comité de empresa, está motivada por el inmediato cierre de las oficinas situadas en las calles Rafael Alberti y Ronda de Nelle.
El personal afectaado por los cierres será trasladado de forma provisional a otras oficinas, en las que, pese a no ser definitivas, se invertirán 140.000 € en su remodelación.
Estas dependencias atienden a más de 300.000 personas, de las que 120.000 son trabajadoras afiliadas y de alta en el sistema da Seguridad Social, y prestan servicio a 10.000 empresas.
