En un comunicado de prensa, la sección sindical de USO en la Universidad de Extramadura considera una tomadura de pelo la medida del Consejo de Dirección de la Universidad de implantar un código ético para sus empleados públicos y ha recordado las propuestas que ya realizó para mejorar los procesos selectivos del profesorado contratado.
En la nota de prensa se ha referido a la presunta falsificación de un título académico en el concurso para una plaza de profesor asociado por parte del marido de la secretaria general, Inmaculada Domínguez, que ha sido cesada de su cargo por estos hechos.
USO ha criticado que el rector de la UEx, Segundo Píriz, «continúe sin dar explicaciones» y se ha preguntado si «informará algún día a la comunidad universitaria».
Para USO, la solución al problema no es sólo firmar un código ético porque «la legislación aplicable a los funcionarios ya regula la exigencia de un código de conducta», y ha mencionado lo recogido en el Estatuto Básico del Empleado Público.
Así, ha subrayado, todos los empleados públicos (laborales y funcionarios) están supeditados al cumplimiento de la legislación vigente, «sin necesidad de tener que firmar ningún código añadido».
En su opinión, desde la dirección de la UEx «intentar desviar la atención de lo acontecido con un código redundante a las obligaciones que, por ley, tienen los empleados públicos».
Esto dice muy poco del equipo de dirección, que «no mueve un dedo por actuar correctamente y divulgar las virtudes la Universidad», además de «no asumir ningún tipo de responsabilidad institucional en esta materia».
USO entiende que la solución a este tipo de problemas «pasa inexorablemente por una modernización real y eficaz» del sistema de concurso de acceso de la UEx, como -dice- así se lo hizo saber al equipo de gobierno en el marco de las negociaciones del Convenio Colectivo del PDI laboral.
A nuestro juicio, no es de recibo que, en pleno siglo XXI, haya un sistema basado en fotocopias en papel, por duplicado, que llegan a una comisión de expertos docentes e investigadores y que, «careciendo de conocimientos administrativos» para verificar la autenticidad de títulos y méritos, «tengan que decidir sobre la validez o no de los méritos alegados por un candidato».
USO trasladó al equipo de dirección varias propuestas, que «aún no han sido respondidas de forma concluyente», dada la «situación de bloqueo» en la que se encuentra la negociación del Convenio Colectivo, «al no quererse abordar, por parte de la Universidad, la homologación salarial propuesta para el PDI laboral».
Algunas de esas propuestas, ha explicado, resolverían, entre otros problemas, la presunta falsificación del título detectada recientemente, como, por ejemplo, entregar toda la documentación de los concursos en formato electrónico.
Además, pide que se cree una unidad especializada en el Servicio de Recursos Humanos que verifique, previamente, la autenticidad de la documentación acreditativa de los méritos alegados en los distintos concursos por cada candidato.
Entre su cometido estará desechar aquellos que no se encuentren debidamente justificados y acreditados, conforme a derecho, eliminando, de este modo, «la posible arbitrariedad de las comisiones de selección, en cuanto a la contabilización de méritos».
Igualmente, propone comprobar la autenticidad de los títulos empleando la base de datos del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y ha añadido que la autenticidad de las publicaciones científicas se comprobaría utilizando el identificador digital de objeto (DOI).
Por su parte, la autenticidad de cualquier certificado expedido se comprobaría mediante su firma digital.
El sindicato estima que estas cinco medidas ya propuestas podrían ayudar a solucionar, en gran medida, los problemas que existen en los concursos de selección del profesorado de la UEx, y que afectan a la «credibilidad» de la Universidad.