Tal y como ha valorado la Confederación Sindical Internacional (CSI), la COP24 de Polonia ha concluido con un acuerdo, pero “no con la suficiente ambición para hacer frente a la crisis climática”. Los compromisos gubernamentales con la Transición Justa son claves para la acción climática.
Las conversaciones sobre el clima de la 24ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático celebrada en Katowice (COP24) ha concluido, después de complicadas negociaciones, con un pacto sobre las reglas para la implementación del Acuerdo de París, pero que carece de la velocidad y la ambición necesarias para poner freno al peligroso calentamiento climático.
“Aún cuando este acuerdo es crucial para mantener vivo el Acuerdo de París, no se ha alcanzado el acuerdo que los científicos del IPCC señalaron como urgentemente necesario; ni tampoco a un acuerdo con la velocidad requerida para asegurar un futuro sostenible para los trabajadores y las trabajadoras”, ha afirmado Sharan Burrow, secretaria general de la CSI.
La dirigente sindical ha cuestionado que “los gobiernos debían mostrar ambición en sus compromisos, pero observamos cómo se crean lagunas legales, se evitan responsabilidades, se retrasan las decisiones y se anulan los derechos. Los intereses económicos y nacionales irresponsables a corto plazo están bloqueando el progreso que necesitamos para salvar a la humanidad de un planeta convertido en invernadero”.
La CSI acogió con satisfacción la iniciativa de la Presidencia polaca de la COP de presentar y adoptar la “Declaración de solidaridad y Transición Justa de Silesia” en la COP24. Firmaron la declaración 53 países y la Comisión Europea.
Al adoptar la declaración de Silesia, los países se comprometen a considerar seriamente el impacto que ejercen el cambio climático y las políticas climáticas sobre los trabajadores, sus familias y comunidades a la hora de preparar e implementar sus nuevas contribuciones determinadas a nivel nacional, los planes nacionales de adaptación y las estrategias nacionales de desarrollo a largo plazo con bajas emisiones de gases de efecto invernadero.
La CSI ha hecho un llamamiento a todos los países para que firmen la ‘Declaración de solidaridad y Transición Justa de Silesia’ a fin de no dejar a nadie atrás. Asegurar una transición justa para los trabajadores, sus familias y comunidades y proporcionar trabajo decente para todos son elementos cruciales para lograr la ambición climática que necesitamos.
“La CSI y sus organizaciones afiliadas se han comprometido a asociarse a una transición justa para asegurar empleos decentes en un planeta vivo. A nivel nacional queremos que se implementen políticas de transición justa. A nivel mundial, este trabajo debe continuar en el ‘Foro sobre el impacto de la implementación de medidas de respuesta en virtud del Acuerdo de París’ y el Comité de Expertos de Katowice establecido en la COP24″, subrayó Burrow.
El movimiento sindical ha acogido con satisfacción la iniciativa del Secretario General de la ONU de convocar una Cumbre sobre el clima en septiembre de 2019 para asegurar una mayor ambición climática y el apoyo financiero para los países en desarrollo.
“La transición justa debe ser una prioridad en el programa de la Cumbre. En la COP de Katowice ha quedado claro para muchas partes que tener en cuenta la dimensión social de las políticas climáticas será el factor clave de la ambición climática que todos necesitamos con urgencia”, concluyó Burrow.