El agua es vida. Para algunos, el agua es lucro. La ISP defiende a ¡LAS PERSONAS POR ENCIMA DEL LUCRO!

Para más de mil niños y niñas al día, el agua es sinónimo de muerte. Las enfermedades transmitidas a través del agua son mortales. Se estima que la mitad de las camas de los hospitales están ocupadas por personas que sufren enfermedades transmitidas por el agua. Se trata de muertes evitables.

Las mujeres tienen una relación crucial con el agua, debido a la división sexual del trabajo, que ha perpetuado “de manera natural” la atribución social de determinados roles y funciones a los hombres y a las mujeres; o debido a los patrones culturales característicos de distintas comunidades; o a las opiniones sobre el cuerpo humano y factores biológicos. Las mujeres y las niñas son las que manejan el agua, que constituye la base de sus responsabilidades asistenciales. El agua es clave para la igualdad, la dignidad, la autonomía socioeconómica y la emancipación. La ISP representa a la mayor parte del personal del sector del agua y el saneamiento del mundo. Se trata de trabajadores y trabajadoras dedicados al servicio público, en empresas mayoritariamente de propiedad y gestión municipal, con empleos poco glamurosos, no necesariamente bien pagados y con poca presencia femenina entre la mano de obra y los cargos de responsabilidad. Lamentablemente, en muchos países, estos trabajadores y trabajadoras carecen de las herramientas para desempeñar su labor adecuadamente, por razones eminentemente políticas: la falta de fondos públicos para las infraestructuras, operatividad y mantenimiento de los servicios de agua y saneamiento.

Los sindicatos de la ISP del sector del agua llevan años colaborando con organizaciones comunitarias y ONG. Nuestros esfuerzos están ayudando a ralentizar significativamente la agenda privatizadora. Formamos parte de la alianza que logró impulsar en las Naciones Unidas la exitosa campaña por el derecho humano al agua y al saneamiento. Nuestros sindicatos apoyan activamente campañas de éxito por que el derecho al agua se incorpore a las legislaciones y constituciones nacionales. La ISP fue, y continúa siendo, artífice de distintas campañas que están luchando por mantener el agua fuera de los acuerdos comerciales de alcance mundial, regional y bilateral. Participamos de manera destacada en la coalición que defiende la remunicipalización o renacionalización de los servicios de agua y saneamiento. Las mujeres son protagonistas clave de estas luchas.

Sin embargo, necesitamos añadir un elemento más a las campañas internacionales y nacionales en defensa del agua: la justicia fiscal.

La falta de fondos públicos acaba degradando los servicios de agua y saneamiento y excluyendo a colectivos completos de la población. La falta de fondos públicos contribuye al deterioro de la salud y a la marginalización de las mujeres y las niñas. Las arcas públicas se están vaciando porque las personas y empresas más adineradas evitan pagar los impuestos que les corresponde, en perjuicio de los servicios públicos. La ISP recomienda que todas las personas y organizaciones que están luchando por los derechos humanos y por unos servicios públicos de calidad se unan a la Campaña en Defensa de la Justicia Fiscal.

Especialmente en el sector del agua y el saneamiento, donde la recuperación total de los costos o la determinación de los precios del mercado son incluso más excluyentes.

Los derechos de las mujeres requieren justicia fiscal y acceso universal a unos servicios de agua y saneamiento públicos de calidad #JusticiaFiscal para los derechos de las mujeres.

Reclamaciones por Contrataciones en Fraude de Ley

Defendemos tus derechos frente a contratos irregulares, velando por la legalidad laboral.

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La reunión concluyó con la ratificación de un informe favorable relativo a la propuesta de complementos E4 presentada por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

Desde FAC-USO vemos estupefactos como los asuntos se dilatan sine die (todavía colea el encuadramiento 5 años después de la firma del IV Convenio), como sistemáticamente se incumplen los acuerdos y, los que tienen potestad para ello, no hacen absolutamente nada, mas allá de “preocuparse”.

Todo un despropósito de aquellos cuya subsistencia depende de que no “molesten” demasiado a la Administración.

Por ello cada día se hace más necesario que sindicatos independientes como USO puedan entrar a negociar, y con tu ayuda lo conseguiremos.