Los sindicatos quieren utilizar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer de la ONU como punto de convergencia para reclamar un Convenio de la OIT firme para hacer frente a la violencia de género en el lugar de trabajo.
En junio del año próximo, la Conferencia Internacional del Trabajo discutirá la elaboración de normas internacionales del trabajo sobre la violencia contra las mujeres y los hombres en el mundo del trabajo, y el movimiento sindical reclama que se adopte un convenio internacional firme al respecto.
Más de una tercera parte de las mujeres en el mundo experimentan algún tipo de violencia en el trabajo, en sus hogares o en la comunidad, y una acción en el trabajo es crucial para hacer frente a la problemática en su conjunto.
Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI, señaló que “Los sindicatos están liderando el camino para erradicar la violencia contra la mujer en el trabajo, y el apoyo de un instrumento legal internacional firme resulta esencial. En todos los sectores y ocupaciones las mujeres están expuestas a la violencia y el acoso, en una escala épica, y donde están privadas de la protección de un sindicato, las probabilidades de que sean víctimas de violación, agresiones físicas, intimidación y acoso son aún mayores. En realidad, la violencia es algo habitual en las cadenas de suministro que ponen comida en nuestras mesas y proporcionan ropa y otros productos manufacturados.
Las mujeres que trabajan en el transporte, la sanidad, la educación, los servicios públicos, el entretenimiento y cualquier otro sector de la economía experimentan violencia, y ya va siendo hora de que gobiernos y empleadores acepten su responsabilidad y colaboren con los sindicatos para poner término a esta situación. Resulta escandaloso que las agresiones sexuales, el acoso sexual y otras formas de violencia no sólo estén toleradas en el trabajo, sino que en ocasiones se utilicen como medios para subyugar a las mujeres en aras del balance corporativo”.
Sindicatos del mundo entero participan en campañas educativas destinadas a sus miembros, para lograr disposiciones en los convenios colectivos que protejan a las mujeres de la violencia y para acordar licencias remuneradas a aquellas mujeres que han sido víctimas de violencia y acoso; además de en campañas en la comunidad en general para erradicar la violencia contra las mujeres y niñas. En todas las regiones están en marcha campañas sindicales para garantizar protección legal a las mujeres, para obtener legislaciones que concedan permisos remunerados a las víctimas y para sensibilizar a la opinión pública y asegurar refugios seguros y tratamiento.
“El trato deplorable a las mujeres en la industria del entretenimiento e incluso en parlamentos nacionales ha saltado a los titulares, pero también hace falta que se preste la misma atención a la pandemia de violencia que sufren muchas otras trabajadoras. El problema se agrava aún más con el estrés que sufren muchos trabajadores y trabajadoras a causa de las enormes presiones a que se ven sometidas las finanzas familiares, y el hecho de que algunos gobiernos están declinando su responsabilidad hacia los centros de ayuda para víctimas de violación, asesoramiento y otros servicios vitales dejándolos en manos de compañías privadas con fines de lucro, abrogando así la responsabilidad de proteger a la población que incumbe a los gobiernos”, indicó Burrow.
Para saber más sobre lo que están haciendo los sindicatos y obtener información sobre campañas y recursos sobre negociación colectiva, sírvanse consultar la página web de la CSI sobre violencia de género y el proyecto de la CES “Seguras en sus hogares, seguras en su trabajo”
