La ISP y sus aliados reafirman su compromiso de llamar a la movilización internacional para sensibilizar e influir en las decisiones políticas para cambiar el discurso sobre los cuidados, reivindicando el papel del Estado como actor y proveedor clave en la transformación de la organización social de los cuidados y reforzando la inversión pública para garantizar el derecho a los cuidados y la atención digna como derecho humano.
Más de 100 participantes asistieron al evento paralelo al Foro de la Generación de la Igualdad celebrado en París el 2 de julio, organizado por la ISP, ActionAid, GATJ, TJN-África, GI-ESCR, CESR, DAWN, WomanKind y moderado por Neelanjana Mukhia de ActionAid.
Las organizaciones de la sociedad civil convocantes compartieron sus visiones feministas sobre cómo los servicios públicos pueden abordar las causas profundas de la desigualdad de género: desde los esfuerzos para reformular la economía incorporando los principios de igualdad de género y derechos humanos, abogando por la justicia fiscal, desmontando los mitos que hay detrás de la comercialización de los servicios públicos, fortaleciendo los derechos de los trabajadores en los servicios públicos, impulsando la construcción de sistemas públicos de atención, y promoviendo enfoques de los servicios públicos basados en los derechos humanos y de abajo hacia arriba.
Sin un papel diferente del Estado y un compromiso de la sociedad para compartir y redistribuir el trabajo de los cuidados, habrá pocas posibilidades de reconstruir una sociedad diferente y mejor
En su discurso de apertura, la Secretaria General de la ISP, Rosa Pavanelli, se congratuló de esta creciente alianza y del movimiento mundial que une sus fuerzas en torno a los cinco objetivos comunes (las «5R») establecidos en el Manifiesto para la Reconstrucción de la Organización Social de los Cuidados, firmado por más de 150 organizaciones y 270 personas. Señaló que la pandemia ha puesto de manifiesto la insuficiencia de nuestros servicios públicos de asistencia y que los principios básicos esbozados en el Manifiesto son más pertinentes que nunca, como demuestra la creación de un Manifiesto sobre los Cuidados similar por parte de la Coalición de Acción por la Justicia y los Derechos Económicos, presentado en el contexto de las actividades de la cuenta atrás para el FMAM-París.
Sin un papel diferente del Estado, y sin el compromiso de la sociedad, en el reparto y redistribución del trabajo de cuidados, habrá pocas posibilidades de reconstruir una sociedad diferente y mejor, dijo Pavanelli, el espacio para la sociedad civil se ha reducido drásticamente en el ámbito mundial haciendo que sea demasiado fácil acallar las voces de las mujeres y los trabajadores. Pavanelli concluyó con un llamamiento a unir fuerzas para que los cuidados sean reconocidos, no sólo como un factor económico, sino como un derecho humano que debe ser proporcionado públicamente.
La actual organización social de los cuidados
Corina Rodríguez Enríquez, de Alternativas de Desarrollo con Mujeres para una Nueva Era – DAWN, presentó los aspectos más destacados de un estudio que está realizando actualmente en colaboración con la ISP. Centrándose en ocho países del Norte y del Sur (Australia, India, Canadá, Argentina, Sudáfrica, Kenia, Polonia y Austria), el estudio analiza la situación actual, incluyendo las buenas prácticas, y ofrecerá algunas propuestas concretas sobre alternativas para reconstruir la organización social del cuidado.
Debemos entender el cuidado como un derecho humano para reivindicarlo como una responsabilidad del Estado.