La prolongada temporada de incendios forestales en Australia está causando estragos entre las comunidades, con 8.400 millones de hectáreas arrasadas y la consiguiente pérdida de vidas humanas, hogares y medios de subsistencia, además de cobrarse la vida de mil millones de animales.
El Consejo de Seguros de Australia estima que el costo relacionado con reclamaciones de indemnización supondría 481 millones de USD, y podría todavía aumentar significativamente. La temporada de incendios durará aún varios meses antes de que lleguen las lluvias.
Moody’s Analytics ha estimado que los costos económicos superarán los 3.000 millones de USD que costaron los incendios registrados durante el ‘sábado negro’ en 2009.
“Australia es un país desarrollado con un Gobierno negacionista respecto al cambio climático y que defiende a ciegas los intereses corporativos y la ambición desmedida. Se ha negado y continúa negándose a tomar las medidas reclamadas por expertos del clima y de la seguridad contra incendios. La reconstrucción costará miles de millones de dólares, repercutiendo en los medios de subsistencia de la población durante varios años, sin contar con los problemas de salud ocasionados por la toxicidad del aire, que supondrán una importante carga durante décadas, tanto para las personas como para el sistema de salud (Medicare). La CSI se solidariza con las familias trabajadores de Australia”, indicó Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI.
En 2008, el prestigioso informe Garnaut Climate Change Review advirtió que “Las temporadas de incendios comenzarán antes, terminarán más tarde y serán más intensas. Este efecto se incrementará con el tiempo pero resultará ya directamente observable en 2020”. Jefes de bomberos de toda Australia han venido reclamando más medidas para la mitigación de incendios, advirtiendo que a menos que el país se dote con su propia flota de aviones cisterna, su capacidad para combatir los incendios se quedará corta. Tales advertencias fueron desestimadas por el Gobierno australiano, calificándolas de activismo climático.
“Los trabajadores de los servicios de emergencias y voluntarios en sus comunidades se sitúan en primera línea, defendiendo a la población, sus hogares y la infraestructura comunitaria. Les extendemos nuestro más profundo agradecimiento por sus esfuerzos y su valor. Son auténticos héroes. El mundo se enfrenta a una emergencia climática y nos queda muy poco tiempo. Los Gobiernos, incluyendo el de Australia, deben comprometerse para reducir sus emisiones, con Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (CDN) renovadas con vistas a la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático que tendrá lugar en Glasgow en noviembre de 2020”, indicó Sharan Burrow.
La central sindical Australian Council of Trade Unions ha establecido un fondo de ayuda en relación con los incendios para los miembros del sindicato que pudieran necesitar apoyo adicional, aparte de la asistencia ya disponible.