En el Día Internacional de Lucha contra el Sida, desde USO queremos reivindicar el uso del preservativo para llegar al objetivo de 2020 de cero transmisiones de VIH. La inversión pública en campañas contra el VIH, así como bajar el tipo impositivo a los preservativos, son claves para alcanzar ese objetivo. La ayuda de los gobiernos es necesaria para poder conseguir el objetivo de cero transmisiones en 2020. Estamos en 2016 y no solo no han disminuido o se han estancado las infecciones de VIH, sino que en el caso de la Unión Europea, han aumentado un 7%, ese no es el camino.
Por eso, este año hacemos especial hincapié en recordar que el preservativo es uno de los medios que evitan la transmisión de esta enfermedad en más de un 90%. Mantener relaciones sexuales de manera segura, así como gozar de una buena salud sexual, son claves para frenar el VIH. Nuestro lema “Por ti, por mi, por una VIHda sana” incide en el uso del condón y en tener unas relaciones sexuales sanas y seguras.
El VIH está rodeado de mitos, de estigmas que marcan a las personas que lo sufren. Así, la tasa de desempleo entre los afectados por VIH/SIDA es mayor a la media estatal; los enfermos se enfrentan a discriminación y prejuicios que condicionan su acceso y trato en el trabajo, viéndose en muchos casos privados de su medio de vida. Por ello, desde USO rechazamos la estigmatización y discriminación por el estado de salud, y repudiamos la vulneración de los derechos humanos en el trabajo.
El paro entre personas con VIH es superior al 50%. Este triste dato lo único que acrecienta es una discriminación socio-laboral de personas con VIH, debido a una estigmatización de la enfermedad. Las personas con VIH, por desgracia, son personas abocadas a la pobreza y en riesgo de exclusión social debido a esa alta tasa de desempleo y porque, por desgracia, en algunas empresas, el estado serológico de la persona parece ser determinante para acceder a un puesto de trabajo, o motivo de despido, algo que ya hemos denunciado desde USO. Ningún trabajador o trabajadora puede ser privado de su derecho a trabajar por el simple hecho de tener el VIH.
Pese a lo que muchas personas creen, el VIH no entiende de una condición o tendencia sexual, el VIH solo entiende de hábitos no saludables en el sexo. Da igual que seamos heteros, bi, gais, lesbianas, trans…el VIH no distingue y nadie estamos a salvo de esta infección, por eso, el evitarla está en nuestras manos y el uso del preservativo, es fundamental.
¿Por qué usar el preservativo en tus relaciones sexuales? Te damos cinco motivos:
1. Es una barrera segura ante infecciones de transmisión sexual, entre ellas el VIH.
2. Ponértelo o decir que se lo ponga la otra persona, solo os va a llevar unos segundos, y los beneficios, toda la vida.
3. Porque da el mismo placer y se siente lo mismo que si no se llevase puesto.
4. No ocupa mucho espacio y lo puedes llevar encima por si te surge una relación sexual de manera repentina.
5. El precio no es muy elevado, una caja de 12 preservativos masculinos cuesta en torno a los 9€ y, además puedes encontrarlos de forma gratuita en centros de salud, asociaciones…
No obstante, el precio del preservativo femenino -1’80€ de media la unidad-, así como su escasa implantación, hace que se deje de lado a las mujeres en la prevención contra la transmisión del VIH y desde USO reivindicamos unos precios más bajos para este tipo de preservativo y una mayor implantación de este tipo de preservativo.
La falta de información sobre cómo se transmite el VIH, así como una falta de percepción en la sociedad de este tipo de infección y una estigmatización y estereotipación de la misma, entre las principales causas de esta exclusión socio-laboral.
En el caso de las mujeres con VIH, éstas se enfrentan a una doble discriminación. Las mujeres con VIH no son parte de los estudios clínicos, lo que hace que los tratamientos sigan las normas masculinas y, en caso de ser víctimas de la violencia sexual, disponen de poco o nulo poder de decisión sobre sus relaciones sexuales, estando indefensas ante posibles contagios.
Por otro lado, la erradicación de la transmisión materno infantil está cerca pero deber seguir siendo primordial que los servicios sanitarios generales y especializados tengan los medios y el personal para atender en todo el territorio nacional a las mujeres portadoras del VIH antes, durante y después del embarazo. El CEDAW considera preocupante medidas como el Real Decreto Legislativo 16/2012, que excluyó a las personas inmigrantes en situación administrativa irregular de la cobertura sanitaria universal, medida que ha tenido un efecto desproporcionado en las mujeres migrantes y podemos añadir en las mujeres con VIH/Sida, mujeres triplemente discriminadas, lo que les ha privado del acceso gratuito a los servicios de salud sexual y reproductiva.
Desde USO apostamos por un pacto de Estado frente al VIH, el sida, el estigma y la discriminación, solicitando a los partidos políticos que promuevan un amplio consenso político en torno a las políticas de respuesta al VIH -tanto en sus aspectos clínicos como sociales- que establezca un marco estable y equitativo de intervención en este ámbito, y su consideración como políticas de estado ante la situación de la enfermedad en España, así como volvemos a instar al Gobierno que invierta en la prevención y educación sobre el VIH porque no pueden seguir aumentando las transmisiones en nuestro país mientras desde el Gobierno se mira hacia otro lado. La educación, como en otros aspectos es fundamental y la inversión, más que necesaria, por eso, pedimos a la nueva ministra de sanidad, servicios sociales e igualdad y al conjunto del Gobierno, que la reducción del VIH en España, sea una de sus prioridades en esta legislatura.