En las epidemias de enfermedades muy infecciosas como la enfermedad por el virus del Ébola, el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS) o el coronavirus (COVID‐19), el personal sanitario (PS) corre un riesgo mucho mayor de infección que la población general debido al contacto con los fluidos corporales contaminados de los pacientes. Los equipos de protección individual (EPI) pueden reducir el riesgo al cubrir las partes expuestas del cuerpo. No está claro qué tipo de EPI protege mejor, cuál es la mejor manera de ponérselos y quitárselos, ni cómo capacitar a los trabajadores sanitarios en el uso adecuado del equipamiento
Fuente: www.prevencionar.com