La estadística de siniestralidad laboral hasta noviembre indica que el número de accidentes de trabajo con baja (558.375) aumentó un 1,3%, mientras que los accidentes de trabajo sin baja descendió en 7.477, hasta los 671.130. Sin embargo, los accidentes in itinere, han aumentado en 696 accidentes, alcanzando la cifra de 79.021.
En cuanto a la gravedad de los accidentes durante este periodo, los considerados como leves han supuesto un aumento de 1,4%, 6.416 accidentes más. En el caso de los graves y mortales se da un descenso de 115 y 39, un 3,4% y 8,1%, respectivamente.
En el mismo criterio de gravedad hay que relacionar los sectores con más resultados mortales. Así, el sector Servicios con 212 es de mayor mortalidad en el trabajo, seguido de la Construcción, con 96, y de la Industria con 94 personas fallecidas. Ha de destacarse el descenso en de accidentes mortales en el sector servicios, un 17,5% con 45 personas fallecidas menos, si bien ha aumentado un 14,3% y un 2,2% en los sectores de la construcción y la industria, respectivamente.
Por comunidades autónomas, la más castigada en cuanto a siniestralidad laboral es Andalucía con 88.310 accidentes y 84 accidentes mortales; Cataluña, la segunda con 87.290 y 64 mortales, y Madrid en tercer lugar con 69.927 accidentes y 40 fallecidos.
Desde USO, consideramos que acabar con la siniestralidad laboral es una obligación que debe ser atendida urgentemente por el nuevo Gobierno a través de la puesta en marcha de políticas de prevención de riesgos laborales eficientes para evitar daños personales. Por ello, se deben reforzar o implantar medidas sociales que contribuyan a frenar la siniestralidad en los lugares de trabajo.