USO, junto a UGT, Satse, Sindicato Médico Andaluz, CCOO, CSIF y SAE, se han concentrado a las puertas de los hospitales de Valme y Macarena para protestar por las bajas y permisos de profesionales sin cubrir. USO-Andalucía ha denunciado así la falta de personal que padecen ambos hospitales, que en el caso del hospital de Valme ha provocado el cierre de la mitad de la cuarta planta izquierda para disponer de los profesionales de ese área para cubrir las bajas más importantes.
Solo en Sevilla, hay unas 600 bajas sin cubrir. En el caso de Valme, entre bajas laborales y permisos de paternidad y maternidad se sumaron, a finales de la semana pasada, 151 personas ausentes y sin cubrir, y sumando otras incidencias, habría un total de 250 o 300 ausentes y sin cubrir.
El recorte en las contrataciones para sustituir al personal ausente por incapacidad transitoria, permisos y vacaciones, está incidiendo significativamente en los centros de trabajo desde mediados de septiembre, lo que repercute directamente en la disminución de recursos humanos en las distintas categorías sanitarias.
“Para cubrir las necesidades asistenciales de los centros sanitarios, el Servicio Andaluz de Salud decidió en un principio resolver esta cuestación realizando una serie de nombramientos en un periodo de 6 meses que finalizaba el 31 de septiembre. La intención de estos nombramientos sería renovar hasta crear contrataciones de larga duración que son interinidades vacantes”, señala Luis Vinelli, responsable de Sanidad de USO-Andalucía. Estos nombramientos terminaron a finales de septiembre, con lo que el personal de los hospitales tiene que doblar sus jornadas, por lo que “estamos pidiendo que se vuelvan a renovar aquellos nombramientos para poner solución a la escasez de plantilla”, expone Vinelli.