El nuevo paquete de medidas de reactivación de la economía, destinado a empresas de sectores estratégicos, no ahonda en medidas de empleo, como regular la ultraactividad o las inaplicaciones
Hoy se publica el Real Decreto-ley de medidas urgentes destinadas a apoyar la reactivación económica y del empleo, aunque poco contiene de empleo, sobre todo de sus cuestiones urgentes, como regular la ultraactividad o las inaplicaciones de convenio.
El decreto es un extenso documento con pocas medidas de incidencia directa sobre el empleo, salvo la ampliación de las bonificaciones para los fijos discontinuos en el sector turístico.
El resto son disposiciones centradas más bien en la recuperación de las empresas a través de nuevas líneas de financiación o el fondo de recuperación. Es una ley, por lo tanto, cuya aplicación afecta más a las compañías. Repercutirá después en los trabajadores, pero no son medidas directas sobre ellos.
No obstante, en USO hemos analizado el texto y extraemos un resumen sobre algunos de los artículos referidos a los sectores laborales más golpeados por la crisis. Además, añadimos nuestras reivindicaciones urgentes en materia laboral, que esperamos sean atendidas en sucesivos consejos de ministros.
Recuperación en el sector turístico y de la automoción
Como medida dirigida a asegurar la protección de los deudores hipotecarios, la ley prevé para el sector turístico la adopción del otorgamiento de un periodo de moratoria de hasta doce meses para las operaciones financieras suscritas entre dichos deudores hipotecarios y las entidades de crédito. Esta medida se orienta a aquellos cuyo inmueble se dedique a una actividad hotelera, a alojamientos turísticos o agencias de viajes.
En cuanto a destinos turísticos, se incluye la creación de los planes de sostenibilidad. Su objeto es fomentar su sostenibilidad. Se establecen, además, disposiciones relativas a la transformación digital de las empresas turísticas que se hayan visto afectados por esta crisis sanitaria. Para los trabajadores fijos discontinuos del sector turístico, se dispone la extensión de bonificaciones y su compatibilidad con exoneraciones de cotizaciones a la Seguridad Social.
En relación al automóvil, se establecen bases precisas para la concesión de ayudas para la puesta en marcha del programa RENOVE. Es un paquete de incentivos de apoyo a la renovación del parque automovilístico. Se presentó el pasado 15 de junio por el Gobierno, aunque no se aprobó hasta el Consejo de Ministros del pasado 3 de julio. Fue uno de los temas tratados en la Mesa de la Automoción, de la que la Federación de Industria de USO forma parte.
Línea de avales y ayudas al sector empresarial con el fondo de recuperación
El Real Decreto-ley también dispone una línea de avales que tiene por objetivo fomentar la financiación dirigida a la inversión. Es una diferencia con la anterior línea, que se dirigía principalmente a hacer frente a las necesidades de liquidez provocadas por el confinamiento. Tendrá un importe máximo de 40.000 millones de euros y la otorgará el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital. Su objetivo es favorecer la financiación concedida por entidades financieras supervisadas a empresas y autónomos para la realización de inversiones.
También se crea el Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas. Tiene como objetivo compensar el impacto de la emergencia sanitaria en el balance de empresas solventes consideradas estratégicas para el tejido productivo y económico. Se acompaña de la creación del Consejo Gestor del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas.
El Consejo Gestor gestionará este fondo de apoyo a la solvencia de empresas estratégicas. Lo hará a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), tendrá un carácter temporal y dispondrá de una dotación inicial de 10.000 millones de euros.
Las ayudas canalizadas a través del fondo deben cumplir con la normativa de la Unión Europea en materia de ayudas estatales. En concreto, con el Marco Temporal relativo a las medidas de ayuda estatal destinadas a respaldar la economía, en el contexto del actual brote de covid-19. Dicho marco establece las condiciones de compatibilidad de las ayudas en forma de aportaciones de capital o instrumentos híbridos de deuda con la normativa de la Unión Europea.
Las ayudas en forma de recapitalización deben estar sujetas a planes de desinversión de la participación estatal que, en todo caso, será remunerada en línea con lo dispuesto en el referido Marco Temporal y cumplirán con el resto de los requisitos establecidos en este.
Un fondo y un decreto de recuperación faltos de ambición
La protección de sectores estratégicos y las moratorias para empresas que se recuperarán son medidas que USO valora. Parar el golpe del desempleo a corto plazo y favorecer su dinamismo en un futuro cercano pasa también por dar un empujón a las empresas, especialmente al gran tejido de Pymes, que generan la gran mayoría de puestos de trabajo en España.
Sin embargo, desde el sindicato USO consideramos “poco ambicioso el contenido de un Real Decreto-ley cuyo título sí lo es. Las medidas urgentes para reactivar la economía y el empleo no pueden reducirse al ámbito de este enésimo decreto. Si hablamos de medidas urgentes para la reactivación, el abanico de necesidades es mucho más amplio, y en USO esperamos que formen parten del próximo Consejo de Ministros”, apura Joaquín Pérez, secretario general de USO.
USO pide regular ya la ultraactividad ante la amenaza de la bajada de salarios
Así, Pérez relata, entre otros: “regular la ultraactividad. Hay que ser realistas, y en USO nos estamos preparando para unos tiempos duros para la negociación colectiva en materia de salarios. La tendencia de esta nueva normalidad va a ser bastante vieja, y pasará por unos salarios a la baja sí o sí. En toda crisis se da por hecho que los salarios deben bajar, cuando hay una corriente muy crítica en este aspecto, y que nosotros defendemos firmemente, que argumenta que la contracción de salarios conlleva contracción del consumo y, por ende, de la economía. Estaríamos abocados a más precariedad y otro retroceso histórico que no nos podemos permitir”.
El máximo dirigente de USO argumenta nuestra petición en que “si el trabajador queda desprotegido al verse obligado a negociar un convenio colectivo a la baja o la amenaza de volver al Estatuto de los Trabajadores, los salarios se van a desplomar. La ultraactividad fue una de las grandes lesiones a los derechos laborales de la Reforma Laboral. USO consiguió su corrección en la Audiencia Nacional, como único sindicato que se opuso frontalmente a ella. Hoy pedimos que se regule para que no sea interpretable”.
Además de blindar la ultraactividad, ligar las exenciones de los ERTE a no acudir a una aplicación de convenio
Junto a la ultraactividad, “ya toca también reforzar la negociación colectiva en cuanto a las inaplicaciones de convenio, otro de los ataques a los derechos laborales conseguidos antes de la Reforma. La flexibilidad para acogerse a los ERTE debe ser suficiente margen de maniobra para que las empresas sostengan su actividad y su empleo. Hay que dar marcha atrás en las inaplicaciones de convenio y, sobre todo, ligar las exenciones de los ERTE a no poder acogerse inmediatamente después a una inaplicación de convenio, pues se estaría defraudando a las arcas públicas y a los trabajadores por igual”, advierte el secretario general de USO.
Igualmente, entre las urgencias del mercado laboral se requiere “una mayor protección de los trabajadores de las contratas y subcontratas. Unas medidas laborales que deberían ser inmediatas en general pero, especialmente, en servicios básicos. Si el otoño nos recibe con una segunda oleada de coronavirus, nuestro sistema de protección básico debe ser más fuerte que nunca para afrontarlo”, remata Joaquín Pérez.
