Aunque parece el título de una película, es una vuelta a la normalidad en este Blog, que hace tiempo no tiene entradas; la culpa como es lógica, es mía.
Pero es que a veces, la actividad sindical impide dedicar un poco de tiempo a los comentarios en esta zona. No puedo comenzar sin olvidar la situación que se ha generado en Catalunya, ya que, como empleado público, no llego a comprender algunas cuestiones.
¿Por qué los políticos deben estar impunes ante la ley, cuando no la cumplen? No entro en si las medidas cautelares son excesivas o no, simplemente digo, que, si incumplen la ley, deben asumir las consecuencias legales y especificadas en las mismas leyes. O, ¿esto solo se aplica al resto de los ciudadanos? Si un funcionario público, se saltase las normas e hiciese lo que quisiera, estaba empapelado y desde luego, nadie le defendería por esos hechos.
Parece tremendo que se justifique esta situación, por motivos políticos. Los políticos tienen capacidad para legislar, por lo tanto, deberían ser los primeros defensores del cumplimiento de las normas aprobadas.
Si el ejemplo es: “que uno se puede saltar la legalidad vigente cuando quiera”, entonces admitirán en el futuro, que cualquier ciudadano por decisión propia, no las cumpla también cuando quiera, y por lo tanto, no contribuyamos pagando impuestos, ni respetemos el código de circulación, o cualquiera otra norma legal; en resumidas cuentas, hagamos los que nos dé la gana, ya que las leyes y normas las podemos incumplir cuando queramos, o mejor nos convenga. ¡situación lamentable! Y lo que es peor, estaríamos en una jungla, en la que imperaría la ley del más fuerte.
Pero la vida sigue, y pasan otras muchas cosas, que como sindicalistas nos deben preocupar.
La situación salarial empieza a preocupar, y lo peor es que el tema de Catalunya, está afectando muy seriamente a esa recuperación salarial. Los empleados públicos, estamos viendo como los presupuestos del 2018 están en el aire, y por lo tanto, cualquier incremento salarial pactado………” en el éter”.
El pasado 7 de octubre se celebró la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, y no hay nada más decente, que un salario digno para que el trabajo lo sea. Una de las conclusiones de muchas organizaciones económicas y sociales en Europa y en el Mundo, es que el Sector Publico debe ser el motor y referente salarial, y si no hay subidas en ese Sector, los empresarios lo toman como ejemplo para tampoco promover aumentos salariales. Si el ejemplo, es la Administración española, el conjunto de los trabajadores de nuestro país, lo llevan claro.
La importancia del salario y empleo en el Sector Publico, es esencial para el conjunto de la sociedad. Uno de los problemas principales que existe en España, son los bajos salarios. Nos encontramos con situaciones tan esperpénticas y contradictorias, como estas:
Dicen:
- La Ministra de Empleo y otros miembros del Gabinete, manifiestan que ahora es el momento de subir salarios.
- Manifiestan que estamos en época de bonanza y es necesario que los trabajadores recuperen la capacidad económica.
- Indican que se debe impulsar la negociación colectiva.
- Piden cumplimientos de acuerdos salariales y convenios
- Elaboración de un pacto nacional para la conciliación y racionalización de horarios.
- Mejorar la lucha contra el fraude laboral.
Hago:
- La Administración propone subidas ínfimas para el conjunto de los empleados públicos.
- Ninguna propuesta de recuperación salarial perdida.
- No hay negociación en las Administraciones, y lo que se negocia es irrelevante.
- Son capaces de subcontratar funciones propias de la Administración, y permiten que accedan a los concursos públicos, empresas que no cumplen los Convenios vigentes, e incluso, acusadas por fraude a la Seguridad Social y a la AEAT.
- No quieren reducir las jornadas salariales, recordemos la batalla de las 35 horas.
- Lo del fraude laboral tiene narices, y esto merece un comentario más amplio….
Lo del fraude laboral y la administración, es algo lamentable. ¿Cómo es posible que la Administración permita en sus contratos públicos, que las empresas que acceden no cumplan los Convenios de su sector? ¿Cómo permite la Administración que los trabajadores de esas empresas no cobren sus salarios regularmente, o se permita, que estén sobreexplotados en su régimen horario?
Todo esto pasa en contratos hechos por las Administraciones Publicas, parece que solo interesa pagar lo mínimo, a sabiendas que quien sale perjudicados son los trabajadores. ¡Eso es inadmisible!
Todos los contratos públicos, deberían llevar un control en materia salarial, para evitar todos estos desmanes que vemos en empresas de seguridad y de limpiezas. Dos de las más afectadas por este descontrol, consentido por la Administración.
Es obligación de la Administración que esto no pueda pasar, y para ello, debemos exigir a nuestros gestores que, en esos casos, se hagan cargo si es necesario de los salarios indebidos y que sancionen a la empresa contratada, incluso que impidan que se pueda presentar con su nombre o con otro ficticio, a cualquier concurso público.
¡Debemos exigir a las Administraciones que cumplan con su trabajo de control!