El comité de empresa de la EMT de Palma, del que USO forma parte, no da un paso atrás en el conflicto laboral que en los últimos tiempos mantiene con la dirección de la empresa.
Por ello, el pasado 27 de abril se celebró una concentración de protesta frente a la sede de la empresa en Anselm Clavé (Palma) en la que USO Illes Balears, como sindicato mayoritario, ha sido parte activa.
Más de medio centenar de trabajadores y trabajadoras se han reunido para denunciar la prepotencia de la dirección de la EMT y para exigir la dimisión del director gerente, Mateo Marcús, por los «continuos incumplimientos de los acuerdos firmados con los sindicatos», ha manifestado Juan Antonio Salamanca, secretario general de nuestro sindicato y delegado del mismo en la empresa pública.
«Es mentira que hayan salido a la calle los últimos 23 autobuses nuevos presentados el lunes por el Consistorio. Además, en las cocheras hay cada día parados cerca de 40 autobuses, de un total de casi 200. La dirección empresarial no refuerza las líneas porque, según ellos, no hay pasajeros, pero no es así, no hay turistas, cierto, pero en los barrios viven los mismos ciudadanos que antes de la pandemia, y necesitan el transporte público. No puede ser que los autobuses pasen cada 20 o 25 minutos habiendo una bolsa de conductores y habiendo vehículos parados», explica Salamanca, quien al mismo tiempo recuerda que «aún no se ha devuelto la distribución irregular de la jornada, no se han restaurado las líneas con respecto a como estaban antes de decretarse el estado de alarma, no dejan cambiar el turno ni el servicio entre conductores, impidiendo así la conciliación laboral y familiar, y sobre todo: no se ha pedido el informe jurídico para ver si se puede alargar el plazo para que entren las 140 personas que ganaron una plaza en la última convocatoria, de las cuales aún no ha entrado ninguna. Y eso no puede ser. Les dicen que de aquí a septiembre de 2022 ‘como mucho’ podrán entrar 30 o 40 personas, con lo que el resto habrá perdido una plaza ganada honradamente». Tendencia a la baja en plantilla que no es nueva, porque «la plantilla ha bajado en 17 personas en comparación con el año pasado, ya que las defunciones o bajas no se cubren».
En el comunicado previo a la concentración por parte del comité, así como en sus declaraciones, Juan Antonio Salamanca dejó claro que «la empresa nos dice que tiene pérdidas, pero nosotros entendemos que ha de ser el Ajuntament de Palma el que ha de asumir los déficits de explotación. Vemos que resulta imposible seguir negociando con ellos, porque lo incumplen todo. Por todo ello, estamos preparando una nueva concentración (en la plaza Cort) y estamos barajando realizar una nueva huelga, porque, además de los incumplimientos, se ha empezado a negociar el convenio colectivo y la empresa pretende hacer unos recortes bestiales de nuestros derechos».
Juan Antonio Salamanca explica que «en ninguna EMT de España se han hecho ERE. Las empresas públicas deben asumir el transporte público. En ninguna empresa municipal de Palma ha habido despidos. ¿Tenemos que ser los trabajadores de la EMT los tontos del Consistorio, a los que se nos apliquen la vacaciones forzosas, las jornadas irregulares…?
La dirección de la EMT no puede demonizar a los trabajadores y hacerles pagar las consecuencias de lo que está pasando, de lo mal que están gestionando«.
