La tragedia constante de miles de víctimas inmigrantes perecidas en aguas del sur de Europa no tiene fin. Día a día el mar se traga la vida y los sueños de mujeres, hombres y niños en busca de un mejor porvenir y de la paz y la seguridad que no le ofrecen sus naciones de origen.
El hundimiento de dos embarcaciones en el Mediterráneo entre las costas de Libia y de Italia, dejando una insopor-table cifra de desaparecidos que su-pera ampliamente el millar de perso-nas, parece haber puesto otra vez en la agenda europea el problema de la inmigración. ¿Hasta cuándo durará el efecto?
USO se declara consternada por esta tragedia al tiempo que siente ver-guenza ajena de las instituciones de la Unión Europea y de sus Estados miembros, incapaces de acordar una política común inmigratoria que acabe con esta sangría humana. Las cifras del drama merecen una respuesta política con mayúsculas.
USO reclama enérgicamente al Consejo Europeo y a los Estados de la UE que –como poco- salven las vidas de la gente.